En una sociedad que evoluciona aceleradamente,
atráves de un mundo globalizado e interconectado con las tecnologías, las
exigencias y eficiencias son más profundas.
Ante este fenómeno de globalización sería idóneo,
responder a la pregunta planteada por Guillermo Rothschuh Villanueva sobre:
¿Qué tipos de profesionales se
están formando?
La gran mayoría de Universidades del país, sin caer
en especulaciones consideraría, solo están
proporcionando información. Valdría la pena resaltar que las capacidades
de cada individuo se miden por competencias que deben ser inducidas para saber
enfrentarse al futuro.
En un artículo publicado en mi blogs hacía
alusión, sobre las competencias que debe
caracterizar a los estudiantes, estimulados por las casas de estudios, hoy me
referiré a la actitud como
valor primordial de todo ser humano, es decir propiciados por la capacidad
interior de la voluntad que emana, el deseo de superación, para emprender y
asumir con el compromiso como bandera y estandarte de todo individuo.
En mi tesis de graduación destacaba de manera
general, sobre la importancia de los valores,
estos no se inculcan en las universidades, se viven desde el seno de la
familia, y estos pueden hacerse notorios, en medio de una sociedad, cada vez
más toxica, es decir llena de
antivalores.
Como eje esencial, y de capital importancia que
deberían estimular en las universidades, es el de la vocación, es decir en la actualidad una gran parte de los
jóvenes no saben o no han discernido, el camino a emprender. Mas cuando te encuentras con docentes que te
dicen, si mi clase no le gusta puede optar por salirse, ante ese fenómeno
muchos jóvenes se ven desafiados, asumiendo, aunque vayan sin una noción concreta de la que carrera que van
estudiar, lo digo desde mi experiencia, que he podido conversar con jóvenes al
iniciar la carrera de comunicación, y en el trayecto del camino se dieron
cuenta que no era ese el camino, hacia la realización profesional. ¿Pero qué
están haciendo las universidades?, quizá nada…simplemente porque no hay
instancias de orientación vocacional, atención psicológica, para que el futuro
profesional sea integro desde todas las facetas de un ser humano. Estoy
convencido que cuando te encuentras con instituciones donde te motivan,
estimulan, premian, y te ayudan a reflexionar, estos aspectos vendrán ser un
aliciente para emprender con determinación tu papel, en la trayectoria hacia el
éxito, para poder apropiarse de sí mismos con autonomía y confianza.
Cuando acudimos a las universidades, debemos ser
conscientes de las habilidades
que cada uno tiene ya sean innatas o aprendidas. Un factor determinante es el
de la comunicación interpersonal, es decir, tener la capacidad de poder
comunicarme, con otros sin ser influenciados por su pensamiento, es evidente
que en las universidades no hay estos espacios, de compartir, dialogar.
Al iniciarte en el campo laboral, ¿qué es lo
primero que piden o preguntan?
Sin duda es sobre algún tipo de experiencias, lo que no se nos
enseña en la Universidad. En este aspecto no me refiero al ejercicio laboral, sino más bien, cómo la
universidad, se involucra con actividades extraescolares, es decir debates,
encuentros con otras universidades, intercambios de docentes, estudiantes,
todos estos elementos deberían ser tomados en cuenta por las autoridades
universitarias, ya que su actividad debe ir más allá de la formación académica,
sino en formar profesionales íntegros, porque al final estos son experiencias
que te forman y educan para enfrentar el futuro.
Viene a mi pensamiento cuando inicie mis estudios
de filosofía en el ITAC, Jacqueline García, catedrática de la facultad de
filosofía de la UCR, solía decir el ser humano debe ser siempre inspirado a
tener curiosidad, en un
sentido amplio, hoy las universidades no estimulan, recordemos que la
curiosidad intelectual, nos debe remitir a estar más prestos e informados para
evolucionar profesionalmente. ¿Pero, cómo pueden colaborar las universidades en
este campo?, simplemente con actividades desafiantes, lecturas, conversatorios, cátedras, lecciones
inaugurales de ciclos académicos.